A los grandes autores que integran el canon literario los perjudica un equívoco que, según José María Micó, conviene deshacer: suele pensarse que son destacados representantes de la historia, la cultura y el pensamiento de su tiempo, cuando, en realidad, son clásicos porque transgredieron las normas...
A los grandes autores que integran el canon literario los perjudica un equívoco que, según José María Micó, conviene deshacer: suele pensarse que son destacados representantes de la historia, la cultura y el pensamiento de su tiempo, cuando, en realidad, son clásicos porque transgredieron las normas, porque fueron más allá de las líneas de fuerza de su época. Los quince ensayos reunidos en este volumen explican en pocas palabras—unas veces haciendo balance y otras centrándose en aspectos descuidados o poco conocidos—por qué fueron y siguen siendo tan singulares Dante, Petrarca, Manrique, Ariosto, el Lazarillo, Cervantes, Gracián, Rubén Darío, Borges o los principales poetas del Siglo de Oro. Un libro dedicado a las obras a las que Micó ha consagrado buena parte de su vida, y que hace del trabajo filológico y hermenéutico un auténtico acto de creación.