Estas páginas presentan las tareas, el trabajo del duelo, de naturaleza espiritual. Cuando hablamos de espiritualidad, nos referimos a esa dimensión inherente a todo ser humano, que no se agota en la religiosidad. Para describir las tareas espirituales del duelo, miramos al pasado e identificamos la...
Estas páginas presentan las tareas, el trabajo del duelo, de naturaleza espiritual. Cuando hablamos de espiritualidad, nos referimos a esa dimensión inherente a todo ser humano, que no se agota en la religiosidad. Para describir las tareas espirituales del duelo, miramos al pasado e identificamos la de recordar sanamente y perdonar lo que esté pendiente, llegando a agradecer la vida compartida y los dones de la persona querida. En el presente, tenemos la tarea de celebrar y ritualizar, gestionando las preguntas por el sentido, realizando ritos individuales y comunitarios que humanicen. También consideramos la importancia de aceptar sanamente la herencia y el legado del fallecido. En el futuro identificamos la tarea de cultivar el dinamismo de la esperanza y el trabajo de salir de sí y pensar y vivir en clave solidaria y creativa, para poder atravesar el duelo en clave resiliente. El trabajo del duelo es una tarea ética.
José Carlos Bermejo es Religioso camilo, doctor en teología pastoral sanitaria y máster en bioética y counselling, es profesor en la Universidad Ramón Lull de Barcelona, en la Católica de Portugal y en el Camillianum de Roma. Ha publicado cerca de cincuenta libros relacionados con la humanización.