Es este Concierto para libertinos un canto a la libertad, como dos autores reunidos en él: Casanova y Balzac. Aventureros, experimentadores antes que literatos, aunque maestros de la palabra y de la vida; creadores de Literatura, en mayúsculas; artistas libres y sin tapujos, en definitiva. Y también...
Es este Concierto para libertinos un canto a la libertad, como dos autores reunidos en él: Casanova y Balzac. Aventureros, experimentadores antes que literatos, aunque maestros de la palabra y de la vida; creadores de Literatura, en mayúsculas; artistas libres y sin tapujos, en definitiva. Y también aquellos libertinos que habitaron la isla de Capri o Taormina, entre las azules aguas y cielos del Mediterráneo.
Todos ellos libertinos, libres en su amplitud de pensamiento, sin condicionamiento de sexo ni prejuicios de ningún tipo, pues al superar los prejuicios y condicionantes que ponían trabas injustificables a la libertad moral, social y humana, abrieron el camino del conocimiento y del progreso social. Espíritus finos y cultivados, no sólo defendieron una apertura de las costumbres en el ámbito sexual, adelantándose en siglos al pensamiento moderno, sino que abogaron también en favor de un espíritu crítico fundamentado en el derecho a la libre conciencia. Y se erigieron, hasta hoy, en los defensores del inalienable derecho del ser humano de la libertad.
Literatura, biografía y placer se dan la mano, así, en este Concierto para libertinos, cuyas páginas nos demuestran que «el pensamiento del corazón» (en palabras de Rilke) hacen del mundo un lugar mejor, más humano y humanista, más libre y libertino, en el más completo sentido de las palabras. Y buen ejemplo de ello son los textos que sobre ello nos ofrece el propio Mauricio Wiesenthal, independiente y libre por naturaleza.