En 1961, el presidente John F. Kennedy anunció que los Estados Unidos iban a intentar poner un hombre en la Luna en menos de diez años. Durante los 2979 días que siguieron a ese discurso, 18 astronautas tripularon sus cohetes espaciales, y 3 murieron incluso antes de conseguir despegar. Se lanzaron ...
En 1961, el presidente John F. Kennedy anunció que los Estados Unidos iban a intentar poner un hombre en la Luna en menos de diez años. Durante los 2979 días que siguieron a ese discurso, 18 astronautas tripularon sus cohetes espaciales, y 3 murieron incluso antes de conseguir despegar. Se lanzaron 8 naves al espacio. 400.000 personas, entre ingenieros, técnicos, científicos, matemáticos y operarios, participaron en el Proyecto Apolo con la esperanza de convertir este sueño en realidad.
'Cuenta Atrás: 2979 días para llegar a la Luna' fusiona la potencia de la literatura de Suzanne Slade con las espectaculares ilustraciones del afamado ilustrador del New York Times, Thomas Gonzalez, y ello distingue esta obra de cualquier otra que se haya escrito sobre las misiones Apolo. Coincidiendo con la conmemoración del 50 aniversario de la llegada a la Luna, este libro es único al adoptar un punto de vista histórico y fascinante, centrado en la importancia que tiene el fijarse objetivos y el perseverar en la experimentación científica, así como en el sacrificio y el duro trabajo necesarios para alcanzar un sueño.
Suzanne Slade es la persona perfecta para este proyecto. No solamente hablamos de una escritora de no ficción juvenil con numerosos premios literarios, sino que además ella misma trabajó como ingeniera mecánica en proyectos espaciales. A lo largo de su carrera, ha tenido la oportunidad de colaborar con ingenieros que participaron en las misiones Apolo. Slade se embarcó en un profundo trabajo de investigación antes de escribir 'Cuenta Atrás', entrevistando para ello a Alan Bean, uno de los seis astronautas que pisaron la Luna y que aún siguen vivos, y manteniendo correspondencia con el astronauta del Apolo 7, Walter Cunningham. Su minuciosidad investigadora encuentra su par en las ilustraciones de Gonzalez, caracterizadas por su increíble atención al detalle y la calidad fotográfica de sus ilustraciones.