• CHESIL BEACH

    MCEWAN, IAN ANAGRAMA Ref. 9788433960061 Ver otros productos de la misma colección Ver otros productos del mismo autor
    Tienen poco más de veinte años, y se conocieron en una manifestación contra las armas nucleares. Florence es una chica de clase media alta, su padre es un exitoso hombre de negocios y su madre una activa profeso­ra universitaria, y viven en una casa donde se comen quesos franceses y yogur. Edward, e...
    Ancho: 140 cm Largo: 210 cm Peso: 250 gr
    Disponible
    10,90 €
  • Descripció

    • NumeroColeccion : 480
    • Coleccion : COMPACTOS
    • NumeroPaginas : 192
    • Autores : MCEWAN, IAN
    • Idioma : Español, Castellano
    • AñoEdicion : 2017
    • FechaEdicion : 01/09/2017
    • ISBN : 978-84-339-6006-1
    Tienen poco más de veinte años, y se conocieron en una manifestación contra las armas nucleares. Florence es una chica de clase media alta, su padre es un exitoso hombre de negocios y su madre una activa profeso­ra universitaria, y viven en una casa donde se comen quesos franceses y yogur. Edward, en cambio, pertenece a una familia que apenas se sos­tiene en la zona baja de la clase media; su padre es maestro, y su madre, tras un imprevisible accidente, vive desde hace años en una nebulosa. Y en su casa no hay comidas caras o extranjeras, las camas nunca se ha­cen, las sábanas rara vez se cambian, ni se limpian los lavabos. Florence es violinista, y Edward ha estudiado Historia. Y ambos son inocentes, y vírgenes, y se aman, y tras uno de esos largos cortejos de tira y afloja, se han casado. Es un día de julio de 1962, un año antes de que, según Philip Larkin, en Inglaterra se empezara a follar, cuando El amante de Lady Chatterley aún estaba prohibido y no había aparecido el primer LP de los Beatles...

    Edward y Florence van a pasar su noche de bodas en un hotel junto a Chesil Beach, y lo que sucede esa noche entre esos dos inocentes, esos jóvenes esposos de una clase social y unos años donde hablar sobre pro­blemas sexuales era imposible, es la materia con que McEwan construye su chejoviano, delicadísimo, terrible mapa de una relación, del amor, del sexo, y también de una época, y de sus discursos y sus silencios.