«A diferencia de sus lectores, que envejecen y nunca vuelven a ser jóvenes, los personajes imaginarios son, al mismo tiempo, quienes fueron cuando los leímos por primera vez, y también el fruto de nuestras nuevas lecturas.» En este breve libro, Alberto Manguel escoge algo más de una docena de person...
«A diferencia de sus lectores, que envejecen y nunca vuelven a ser jóvenes, los personajes imaginarios son, al mismo tiempo, quienes fueron cuando los leímos por primera vez, y también el fruto de nuestras nuevas lecturas.» En este breve libro, Alberto Manguel escoge algo más de una docena de personajes literarios (de Caperucita Roja al Conde Drácula, de Job a Long John Silver) y a través de ellos nos habla, con originalidad, humor y lucidez, de la condición humana, de nuestro mundo moderno, y de la admirable persistencia de estos seres inmortales y queridos.