Zbigniew Herbert trabajó durante veinte años en El rey de las hormigas y, no obstante, la obra quedó inconclusa hasta que su editor polaco recopiló los materiales, fragmentos y esbozos para darle la forma que hoy presentamos. En todos los textos, el poeta parece decidido a concederse la libertad de ...
Zbigniew Herbert trabajó durante veinte años en El rey de las hormigas y, no obstante, la obra quedó inconclusa hasta que su editor polaco recopiló los materiales, fragmentos y esbozos para darle la forma que hoy presentamos. En todos los textos, el poeta parece decidido a concederse la libertad de celebrar su amor por la civilización de la Antigu¨edad dando nueva vida a los mitos. El resultado es una recreación personalísima, colorida y luminosa de un buen número de personajes de la mitología clásica, algunos conocidos por los lectores y otros injustamente olvidados: en las hábiles manos de Herbert, gracias a la sutileza e ingenio del poeta, Cleomedes, Atlas, Ares, Cerbero, Endimión o Áyax parecen convertirse en nuestros contemporáneos, y sus peripecias, sus destinos y el fabuloso mundo en el que vivieron nos invitan a reflexionar sobre el presente y, muy a menudo, a reír.