Nápoles, la colina de Capodimonte, años cincuenta y sesenta.
Una mujer, ante su madre agonizante, rememora los lazos que irremediablemente las han unido. Sumergiéndose en las vísceras de uno de los barrios más depauperados de la ciudad, relata la historia de su madre, desde la dura infancia rural hasta su encuentro, en la posguerra, con el que será su marido, un heredero desheredado que marcará el futuro de todos. La usura, que acabará siendo el sustento familiar, permitirá a la protagonista adentrarse en el latir del vecindario, rodeada de personajes como la amiga y diabólica Annarella, el utópico maestro Nuziata o el trágico Mariomaria, sin olvidar a la familia paterna, aferrada al pasado hasta la enajenación... Todos ellos conforman un coro de almas cuyas historias transportan al lector a un mundo frágil pero cruel y violento, poético pero devastador.