Es hora de meterse en la cama, pero no tenemos sueño, solo tenemos ganas de que nos cuenten un cuento.
Que no sea ni muy corto ni muy largo, pero que sea cantarín y que salgan animales: vacas, jirafas y también tortugas y ballenas y elefantes y conejos... Y que se bañen en el mar y lleguen tarde al cole y que tengan mocos y que no les guste la sopa.
Porque los más pequeños aún no sabemos leer y ¡queremos que nos cuenten cuentos!