Tercera novela de Jonathan Franzen, Las correcciones ?editada por primera vez en castellano en 2002? marcó un punto de inflexión en la trayectoria de su autor y lo consagró como uno de los más destacados escritores norteamericanos contemporáneos y uno de los más finos intérpretes de la compleja real...
Tercera novela de Jonathan Franzen, Las correcciones ?editada por primera vez en castellano en 2002? marcó un punto de inflexión en la trayectoria de su autor y lo consagró como uno de los más destacados escritores norteamericanos contemporáneos y uno de los más finos intérpretes de la compleja realidad de nuestra época. Con esta historia inmisericorde de una típica familia norteamericana, Franzen obtuvo el National Book Award y el Premio James Tait Black Memorial, fue finalista de los premios Pulitzer y Pen/Faulkner, vendió cuatro millones de ejemplares y su éxito alcanzó una dimensión internacional. De este meticuloso retrato de los Lambert emergen de forma brillante y profundamente humana las angustias y contradicciones de toda una sociedad, la norteamericana, y de una época, la última década del siglo xx. Alfred Lambert es un ingeniero de ferrocarril jubilado cuya percepción de la realidad empieza a resquebrajarse a causa de la enfermedad de Parkinson. Su esposa Enid, tras cincuenta años de matrimonio, sigue obsesionada con mantener el orden en su enorme casa de un próspero barrio residencial. Los tres hijos se establecieron en la costa Este años atrás, lejos del hogar familiar. El mayor, Gary, es un alto ejecutivo bancario, un modélico padre de familia acosado por el fantasma de la depresión. Chip, el segundo, tras su fracaso en el mundo académico, se ha enfrascado en un nuevo proyecto de dudosa legalidad. Y Denise, la menor, extremadamente competitiva, triunfa como chef de un restaurante de moda, pero sufre los reveses de una vida sentimental inestable. En el país, la realidad económica corrige las expectativas sobrevaloradas del mercado bursátil, mientras los medicamentos más avanzados corrigen los trastornos del ánimo. Pero, en el ámbito de la familia, ¿pueden los hijos corregir los errores de sus padres? Y en un orden de cosas más concreto, ¿logrará Enid reunir a todos sus hijos para pasar una última Navidad juntos?