David Taguas, reputado economista, reflexiona en este libro sobre la actual situación económica de nuestro país y expone sus propuestas para conseguir una pronta recuperación. En primer lugar, repasa los hechos que dieron lugar a la crisis y, para ello, relata lo que llama las cuatro grandes bodas d...
Ancho:
150
cm
Largo:
230
cm
Peso:
400 gr
Descatalogat
17,95 €
Descripció
ISBN :978-84-234-1823-7
FechaEdicion :01/02/2014
AñoEdicion :2014
Idioma :Español, Castellano
Autores :TAGUAS COEJO, DAVID
NumeroPaginas :272
Coleccion :ECONOMÍA
David Taguas, reputado economista, reflexiona en este libro sobre la actual situación económica de nuestro país y expone sus propuestas para conseguir una pronta recuperación. En primer lugar, repasa los hechos que dieron lugar a la crisis y, para ello, relata lo que llama las cuatro grandes bodas de nuestra economía, a saber: nuestro apego al gasto público –que se traduce en un escaso rechazo social a mantener elevados porcentajes de déficit–; nuestra excesiva ponderación del presente en la elección intertemporal entre consumo y ahorro –lo cual es el origen de una disparatada política fiscal que penaliza extraordinariamente el ahorro–; nuestra creencia en que debe mantenerse siempre y en cualquier circunstancia el poder adquisitivo de los trabajadores –un principio tan arraigado que ha entorpecido gravemente las relaciones laborales– y, por último y como cuarta boda, la excesiva dependencia del crédito –lo cual ha motivado una deuda pública y privada sin precedentes. Cuatro bodas que tuvieron un fatal desenlace: el funeral de la economía española, inmersa desde hace más de seis años en una crisis económica de la que no levanta cabeza debido a la deuda externa –que pesa como una losa y dificulta la recuperación– y a una tasa de paro que a lo largo de estos años se ha incrementado desde un 8 por ciento al actual 26 por ciento, una cifra histórica en España. ¿Qué hay que hacer para revertir la actual situación? En su hoja de ruta, Taguas aboga por reducir el gasto público en cinco puntos del PIB (bajando del 46 al 41 por ciento en 2016), reducir los impuestos a familias y empresas, reformar la Administración y las empresas públicas e impulsar políticas que incrementen la competencia. Con tales medidas, el ahorro aumentaría 11 puntos del PIB, la inversión volvería al 25 por ciento, se crearía empleo y se conseguiría un significativo crecimiento económico. Y, todo ello, de la mano de Europa, socio imprescindible para conseguir una pronta recuperación económica